Según la última encuesta Casen, en la Región de Magallanes viven 28.940 adultos mayores, los cuales representan el 19,2% de la población general. De estos, un 62,9% son jefes de hogar, es decir, están a cargo de sus hijos, nietos y demás personas que componen un amplio núcleo familiar.
No obstante, hay una población de ancianos que actualmente viven solos y sin un apoyo familiar cercano al que puedan recurrir ante cualquier emergencia o inconveniente que tengan.
Tras el trágico incendio que afectó la madrugada del sábado 12 de agosto a dos adultos mayores (la mujer, Nancy Mancilla, falleció en el lugar), fue la Municipalidad de Punta Arenas la que se encargó de dar alojamiento a Héctor Galli, su pareja. No obstante, no todas las personas de la tercera edad cuentan con estos beneficios, por eso las autoridades hacen el llamado a la población para advertir sobre personas que se encuentren en esta situación.
Según datos entregados por el Servicio Nacional del Adulto Mayor en Magallanes (Senama), dependiente del Ministerio de Desarrollo Social, existe un registro de 250 adultos mayores que actualmente viven solos en las comunas de Punta Arenas, Puerto Natales y Porvenir, quienes están integrados al programa Vínculos del Senama, el cual interviene en los casos donde los ancianos estén solos y no integrados a la red de apoyo, conformado por municipalidad, organismos públicos y organizaciones sociales (juntas de vecinos, agrupaciones étnicas, de adultos mayores, entre otros).
Carolina Armenakis, directora regional del Senama, explicó eso sí que actualmente no existe un catastro de la totalidad de personas de la tercera edad que vivan solas en la región, contando sólo con estas 250 personas contabilizadas por el Ministerio de Desarrollo Social en conjunto con las municipalidades. Sin embargo, ante situaciones de emergencia o presunción de desgracia, “se alerta a la red, se puede hacer una denuncia o a través de las redes sociales, los medios o algún vecino. Luego de eso, se activa la red buscando algún familiar cercano, o en el caso de tener que internar a la persona mayor, se busca un centro de larga estadía”, explicó Armenakis.
La directora explicó que cada caso es diferente, por lo que se debe estudiar bien la situación del adulto mayor en cuestión. A través del programa del Senama, además se realizan visitas para evaluar la condición de la persona, por si se hace necesario algún traslado al hospital, centro de larga estadía o si los familiares poseen los recursos para enviar al afectado a algún establecimiento privado.
Por ende, también es responsabilidad de la comunidad estar alerta y ayudar a cualquier vecino de la tercera edad que pueda necesitar apoyo.