Varios años debieron pasar para que un abuelo enfrente a la justicia tras graves delitos de connotación sexual en contra de menores de edad. A pesar de esto, ayer fue condenado por abusar de sólo uno de ellos, mientras que por la otra víctima la causa fue prescrita.

La Fiscalía acusó a Rubén Holoferne Díaz Díaz, de 72 años, por hechos que habrían ocurrido entre los años 2002 y 2006 en perjuicio de dos víctimas, la primera una niña de 10 años, nieta de la pareja del imputado, quien en esa época se encontraba en su domicilio, lugar donde existía confianza, ya que la menor le decía “Tata”, quien propiciaba quedarse a solas con la menor.

En ese contexto le comenzó a realizar tocaciones en distintas partes de su cuerpo, pidiendo además que le toquen sus genitales, actos que se repitieron en varias oportunidades. De la misma manera, el imputado aprovechó de realizar la misma agresión sexual en contra de otro nieto de su pareja, un niño de nueve años a la época de ocurrido los hechos, esto es entre los años 2006 y 2010, en reiteradas oportunidades. El hecho que detonó la denuncia fue que la madre de la víctima se percató que se encontraban ambos en el baño y al solicitar que abran la puerta, el imputado obligó al menor a mentir.

Con estos antecedentes, al imputado se le solicitaba una pena de 6 años de cárcel por los delitos de abuso sexual reiterado. Sin embargo, los jueces del Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas lo absolvieron por el primer caso, mientras que por el segundo fue condenado. La sentencia se entregará el próximo sábado 21 de octubre a las 13 horas.

El fiscal jefe de Punta Arenas, Fernando Dobson, señaló que “a principio de año hubo un juicio en que el tribunal declaró la prescripción de estos delitos, esto porque eran denuncias de hechos ocurridos hace bastantes años. Sin embargo, junto a la parte querellante apelamos de esa situación y la Corte de Apelaciones revocó esa decisión y ordenó realizar el juicio.

Fue así que ahora se logró una condena por una de las víctimas que en esa época era menor de edad y al momento de la denuncia, mientras que a su hermana mayor se declaró la prescripción, pero estamos conformes con este veredicto condenatorio, ya que era un elemento dificil probar estos hechos muy antiguos, y ahora que la víctima es adulto declaró ante los jueces por hechos que le pasaron cuando tenía 9 años”.

La Fiscalía espera que la pena se aplique dentro del rango de los 3 años y un día a los 5 de presidio.