Estudiantes de varios liceos de Santiago, adheridos a la movilización que se desarrolla hace varias semanas con tomas de colegios y manifestaciones públicas, hicieron ocupación de la sede en Santiago de las oficinas del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, en sus siglas en inglés). En momentos que el organismo celebra los 20 años de vigencia de la Convención de Derechos del Niño en Chile, los liceanos decidieron ocupar la sede. Para ésto un grupo se encerró en las dependencias, mientras otros permanecieron en las afueras del recinto.
Ahí llegaron también efectivos de la policía, aunque no se registraron incidentes.
“No hay disposición para hacer un cambio” manifestó el portavoz del grupo, Ronald Román, explicando que con esta acción apelan a la comunidad internacional a contribuir en la búsqueda de una solución al conflicto.
Reiterando las demandas, Román expresó que los estudiantes exigen que “el Estado se haga cargo de financiar” y garantizar una educación gratuita e igualitaria, lo que se alcanzará, agregó, con “un cambio en la Constitución”.
Francisca Palma, encargada de Unicef en Chile, declaró que, a pesar del ingreso sorpresivo, la ocupación fue pacífica y que el organismo defiende el derecho de los estudiantes a ser escuchados por las autoridades y a participar en el diálogo para la solución de la denominada crisis.
Los estudiantes aseguran que finalizarán la toma tras conversar con un diputado que se comprometió a escuchar sus demandas, cuyo nombre no fue indicado.
“La propuesta del Gobierno es más de lo mismo”
Por otra parte, el conglomerado de estudiantes universitarios, agrupados en la Confech, respondió con un enérgico rechazo a la propuesta entregada por el Gobierno para renovar la educación.
Según el documento de respuesta, redactado en una reunión que tomó ocho horas, la Confech considera la propuesta como “unilateral y no un acuerdo de país”. Además subrayaron que “reducir el conflicto a la mayor inyección de recursos sin parámetros claros, no logrará superar la profunda crisis de la educación”.
El escrito indica que el acuerdo propuesto por el Presidente Sebastián Piñera “corresponde a un proyecto unilateral y no a un acuerdo de país”. Asimismo, agregan que la propuesta “no responde a los ejes y desafíos que esperamos para el futuro de nuestro país”.