Para fines de febrero se esperan los informes o minutas de los técnicos que acudieron a la visita a terreno, a fin de que el equipo científico haga una propuesta completa de medidas de corto plazo. Entre los días 30 de enero y 3 de febrero de 2012 se concretó la visita al Parque Nacional Torres del Paine (PNTP) por parte del equipo interdisciplinario integrado por expertos de distintos ámbitos científicos y pertenecientes a instituciones académicas y organismos públicos, tanto de la Región de Magallanes y Antártica Chilena como del resto del país.
El encuentro tuvo como objetivo hacer un levantamiento preliminar de información sobre las condiciones de la vegetación, sistemas hídricos y paisajes afectados por el incendio ocurrido el 27 de diciembre de 2011 y además, identificar las acciones tempranas que se requerirían para la restauración ecológica de las áreas afectadas.
Durante el desarrollo del trabajo en terreno el equipo se desplegó en las distintas zonas afectadas por el siniestro, concretándose en el primer día de inspección un recorrido general desde el sector del Lago Sarmiento hasta el sector del Lago Grey, a lo largo de la red de caminos del parque. En los días posteriores, el equipo se dividió en grupos para abarcar distintos temas y tomar muestras, de acuerdo con las disciplinas de los integrantes.
Según lo informado por Rodrigo Guijón, Jefe del Departamento de Áreas Protegidas del Ministerio del Medio Ambiente (MMA), se sostuvieron reuniones con el equipo del Burned Area Emergency Response (BAER), del Servicio de Parques Nacionales de Estados Unidos, durante los tres días de estadía en el Parque Nacional.
Medidas y criterios para la restauración
Según Guijón, las discusiones sostenidas durante la vista al PNTP fueron muy productivas y permitieron identificar un conjunto de medidas urgentes o tempranas a aplicar para la restauración del lugar. “Estas medidas deberán ser todavía corroboradas con el equipo científico completo coordinado por el Ministerio del Medio Ambiente, pero se logró un acercamiento concreto a las diferentes líneas de acción que deben ser abordadas, como parte y en forma preparatoria para la restauración de mediano y largo plazo de la zona siniestrada”, señaló el profesional.
Como criterios para la restauración, se estableció como imagen-objetivo la recuperación a nivel de paisaje, con enfoque ecosistémico; es decir, recuperar el paisaje propio del Parque Nacional resguardando su integridad ecológica. En este sentido, la aplicación de medidas urgentes y de mediano plazo apunta a etapas intermedias de recuperación del paisaje y de rehabilitación de funciones ecológicas, y a largo plazo a la restauración de los ecosistemas del parque.
También, se incluyó la focalización en áreas críticas con la idea de optimizar recursos y lograr una restauración eficaz considerando la capacidad de regeneración natural de al menos parte de la vegetación propia del parque.
Las primeras de estas medidas se relacionan con la futura recolección de semillas de ciertas especies desde las áreas no afectadas por el fuego, para contar con un stock genético del propio Parque Nacional o sus alrededores, y en la siembra de una parte de ellas para intentar una reforestación temprana aprovechando el ciclo natural de las semillas.
Pasos a seguir
Para fines de febrero se esperan los informes o minutas de los técnicos que acudieron a la visita a terreno, a fin de que el equipo científico haga una propuesta completa de medidas de corto plazo que se espera esté finalizada a fines de marzo.
Con posterioridad, el equipo científico se abocará a la elaboración del plan de restauración de mediano y largo plazo, que se espera esté terminado en mayo de este año.