Tras conocerse ayer la información que la empresa Methanex iniciará actividades exploratorias en el bloque Lenga y Caupolicán en Magallanes, el Sindicato de Trabajadores de Enap levantó nuevamente a la alerta a partir de lo que aseguran es una prueba más de los avances en la privatización de la empresa. En conferencia de prensa, arremetieron fuertemente en contra de la compañía canadiense y argumentaron que ésta sólo persigue aumentar sus utilidades a través de la búsqueda de gas, donde la comunidad será desplazada de todo objetivo social, donde los acuerdos se toman “a espaldas de la ciudadanía”. Esta reflexión, fue compartida por el senador Pedro Muñoz, quien adhirió al repudio de los dirigentes frente a los hechos acontecidos.
Informaron además, sobre la gran irregularidad que significa que la empresa Apache abandone los trabajos sin cancelar por el abandono del bloque. “Si nosotros (Enap) quisiéramos retirar un bloque en Argentina, significaría pagar sobre US 300 millones, y aquí Apache se va sin pagar nada, sino que se lo traspasa a otro”, afirmó Alejandro Avendaño, presidente del sindicato.
La directiva sindical se mostró preocupada por la realidad que se esconde en estos anuncios, donde la participación de la Empresa Nacional del Petróleo se ve nuevamente reducida al entregar un 10% al igual que Petromagallanes, sumando el 20% que consigue Methanex, el que a su vez, comenzaría estudios sobre el Shale gas provocando indignación en los trabajadores de Enap, pues fue un compromiso del renunciado ministro Álvarez que aquellas labores serían exclusivamente de la filial en esta región.
El sindicato lanzó también sus dardos al nuevo ministro de Energía, Jorge Bunster, quien en su primera reunión con los dirigentes del petróleo en Magallanes, hace menos de 10 días, aseguró no tener información sobre la entrega de bloques de 2007 a través de los Contratos Especiales de Operación Petrolera (Ceop) que serían traspasados a terceros. “Es por medio de acciones como ésta que confirmamos que esto se trata de una privatización encubierta”, manifiestan los dirigentes sindicales.
El Sindicato de Trabajadores de Enap, comprometido con el progreso de la empresa, continuará dando muestras de la necesidad que tiene hoy la región y el país de contar con políticas energéticas que se traduzcan en desarrollo y no retrocesos por medio de la entrega del patrimonio a privados. Se declaran abiertos a un diálogo franco y de respeto mutuo, anteponiendo siempre la legítima defensa de la empresa que es de todos los chilenos.
Aseguraron también que “el fortalecimiento de la empresa es fundamental para que la comunidad de Magallanes cuente con un adecuado suministro de gas por muchos años más. Para ello no necesitamos ayuda de privados porque podemos hacerlo nosotros, lo que tiene aún mayor importancia dada nuestra característica de región fronteriza, lo que tiene una vital importancia geopolítica y estratégica”.