Ante la amenaza latente de la Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (H5N1) en el ecosistema polar, el Instituto Antártico Chileno (INACh) y el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) sostuvieron una reunión estratégica en Punta Arenas. El objetivo es blindar el territorio más austral del planeta mediante protocolos de vigilancia epidemiológica y bioseguridad reforzados para la presente temporada.
La detección de este virus en aves silvestres de zonas subantárticas ha encendido las alarmas científicas, motivando una respuesta coordinada que integra la investigación de vanguardia con los sistemas de control sanitario oficial.
La reunión, que contó con la presencia de especialistas en epidemiología y sanidad animal, definió los siguientes pilares de trabajo:
Unificación de Criterios: Integrar la vigilancia epidemiológica del SAG con los protocolos operativos del INACh para las expediciones científicas.
Gobernanza Internacional: Coordinar las acciones nacionales con las medidas adoptadas por los países firmantes del Sistema del Tratado Antártico.
Protección de Fauna: Implementar monitoreos constantes en colonias de aves y mamíferos marinos para detectar tempranamente posibles brotes de la cepa H5N1.
Sanidad Regional: Anticipar impactos que puedan afectar no solo a la fauna nativa, sino también a la producción pecuaria en la Región de Magallanes.
Para el Dr. Marcelo González, investigador del INACh, la instancia es fundamental para la anticipación: "El objetivo central es fortalecer la coordinación para mitigar impactos sobre la fauna silvestre y la sanidad animal".
Por parte del SAG, participaron su director regional (s), Juan Francisco Álvarez, junto a los expertos Álvaro González Rubio y Javier González Martínez, quienes enfatizaron la importancia de mantener canales de comunicación permanentes y campañas de información pública para proteger el patrimonio sanitario de la zona.
Como parte de los acuerdos, se recordaron las estrictas normas para quienes viajan al continente blanco:
Desinfección obligatoria de calzado y vestimenta antes y después de visitar colonias de animales.
Mantener distancia mínima de seguridad con la fauna silvestre.
Prohibición de contacto con animales que presenten signos de enfermedad o comportamiento errático.
Reporte inmediato de hallazgos de ejemplares muertos a las autoridades correspondientes.