El yin y el yang (en chino lo “oscuro-brillante”) son dos conceptos del taoísmo, que son usados para representar o referirse a las dos fuerzas fundamentales opuestas y complementarias, pero interconectadas, que se encuentran en todas las cosas; y que esta filosofía atribuye a todo lo existente en el universo. Llevando este concepto a la realidad nacional, trabajador y empresarios forman estas dos fuerzas opuestas pero complementarias, interconectadas por un solo factor… el dinero

En este caso el dinero de los trabajadores (ying) sirve para financiar las grandes inversiones de unos pocos empresarios (yang) en un modelo de recaudación forzada por ley en favor de este pequeño grupo de “privilegiados”, que son los dueños o accionistas de las AFP’s, los que están protegidos por la Ley y por los parlamentarios de este país. Estos empresarios, a su entera discreción, invierten en una serie de acciones nacionales e internacionales, generando una danzas de millones de dólares para financiar sus proyectos, algunos de los cuales nos han hecho perder millones de pesos e nuestros fondos de pensiones futuros para los actuales pensionados y para cada uno(a) de los(as) trabajadores de este país que se pensionaren en el futuro. Mientras los bancos, las mineras, las concesionarias de los servicios básicos, los Mall’s, la cadenas de venta del retail y una serie de empresas de dudosa reputación reciben millones de dólares a tasas de intereses mínimas y los mercados y las bolsas del mundo tienen resultados positivos, los(as) trabajadores de este país siguen perdiendo rentabilidad en sus fondos, lo que deja al ying y al yang en absoluto desequilibro, lo que implica un universo también desequilibrado, lo que es un riesgo inminente.

Según el boletín de Ciedess, en lo que va del mes de abril (con valores cuota al día 24), los fondos máscriesgosos, A y B, registran caídas de -5,34% y -4,56% respectivamente; mientras que el fondo C, de riesgo moderado, presenta un retroceso de -4,13%. Por su parte, los fondos más conservadores, D y E, obtienen pérdidas de -3,92% y -3,70%. Estas cifras son relativamente similares a las acumuladas en el año 2024. Los fondos A y B registran ganancias de 4,43% y 2,82% respectivamente, mientras que el fondo C presenta una caída de -0,07%. Por su parte, los fondos D y E obtienen pérdidas de -3,40% y-4,27%. La consultora afirmó que el resultado del fondo E sería su segundo peor desempeño acumulado de un año (enero-abril) desde su creación, luego de la caída de -6,53% en 2021; mientras que para el fondo D, sería su tercer resultado acumulado más bajo, tras las pérdidas de -4,98% en 2021 y -3,43% en 2020.

Como podemos observar, por muy bien que estén los mercados, por mucho que los accionistas ganen millones de dólares, por mucho que la economía de varios países prospere, nuestro fondos siempre pierden, lo que nos debe llamar a una reflexión de corto plazo… ¿existe algún proyecto de Ley más importante y urgente de resolver que la reforma al sistema de pensiones del país?