Luego de varios días de juicio oral en contra de un sujeto mayor de edad, ayer el tribunal determinó condenarlo por delitos cometidos en contra de cinco víctimas, todas incluidas en una investigación de explotación sexual infantil por hechos ocurridos el año 2024 en Punta Arenas.
El sujeto, habría cometido los hechos en contra de menores de edad, de entre 13 y 17 años, siendo cinco las jóvenes afectadas por esta situación. El modus operandi siempre era el mismo: les daba alcohol y droga a cambio de encuentros sexuales.
La fiscal Wendoline Acuña manifestó su satisfacción una vez finalizado el juicio, indicando que “después de un arduo trabajo que realizamos con el equipo de explotación sexual, conformado por la Fiscalía y la PDI, logramos este veredicto, donde prácticamente sr acogió completamente nuestra acusación y estimó culpable a Pablo Millapel Rodríguez por todos los delitos, violación, abuso sexual, abuso sexual y violación reiterados en contra de menores de edad entre 13 y 17 años, bajo la hipótesis del grado grave de desamparo de ellas”.
La representante del Ministerio Público agregó que “el tribunal comprendió todos los predicamentos que indicamos al inicio y al final de juicio, considerando el fenómeno de la dinámica de explotación sexual que se está dando en nuestra región. Ahora esperamos prontamente recibir el quantum de la pena; nosotros estamos solicitando en sumatoria, alrededor de 50 años de presidio, y las penas accesorias que ameritan este tipo de cosas”.
Sobre cómo concertaba los encuentros con las menores, indicó que “él tenía acceso con algunas niñas, porque era líder de una batucada y lo conocieron ahí algunas de ellas, las otras a través de una plataforma llamada Grinder, donde abordaba a las víctimas a través de un intercambio, de objetos lícitos e ilícitos, que le entregaba luego de cometido el acto sexual. Estos hechos ocurrieron entre el mes de enero y marzo del año 2024, afectando a cinco niñas, de entre 13 y 17 años”.
El inicio
Lo que detonó esta investigación, explicó la fiscal Acuña, fue que “una de ellas (menor víctima) da cuenta de una situación acontecida con el imputado, donde además se sintió atemorizada luego de que fue agredida sexualmente; fue agredida físicamente por el sujeto, y posterior a eso surgen las versiones de la otra adolescentes, manifestando que ocurrían estas prácticas”.
La lectura de sentencia quedó fijada para el próximo viernes 16 de mayo a las 13 horas.